Con la mirada atenta a distintas pantallas, en las que monitorea los piques y el vaciado que las palas LHD hacen del mineral, Juan Carlos Cornejo, coordinador del sector Sub-6 Reservas Norte, contesta una serie de mensajes que recibe por radio. También atiende llamadas por teléfono y, cada cierto rato, se levanta a actualizar la pizarra que tiene a sus espaldas, donde mantiene el estado de cada una de las máquinas de su área.

Su rol es clave, pues tiene la tarea de mantener actualizada la disponibilidad y operación de las máquinas que vierten el mineral a los piques y velar por la seguridad operacional de sus compañeros de trabajo en la mina durante la reducción con explosivos.

¿Cuántos años lleva en la empresa?

Son 24 en la División El Teniente. Me toca coordinar los movimientos de los equipos, interactúo con los operadores y personal externo, eléctricos, mecánicos y de trabajos especiales. Todo pasa por el coordinador, que soy yo.

¿Cómo ha sido su experiencia y cuánta responsabilidad hay en sus labores?

Esta función es difícil describirla en pocas palabras. La seguridad es muy importante, debo coordinar y asegurarme de que cuando se realice la reducción de rocas con explosivos (o “cachorreo” como se le conoce en la mina), se cumplan todos los parámetros y estándares de seguridad.

¿Cómo es un día de turno en la mina?

Cuando se inicia un turno, se les da las instrucciones a los trabajadores, primero las charlas de seguridad, y luego repasar los roles en que ellos ya están instruidos para trabajar. Debe existir una alta capacitación por ejemplo para mover un equipo de alto tonelaje, trabajar en una zona determinada de extracción y conocer el sector. Si no se trabaja así, uno queda expuesto y esos riesgos los debo minimizar al máximo.

¿Y qué es lo mas relevante en su labor?

Hay cosas mínimas que debemos respetar para no tener accidentes. Eso no te va a dar un trofeo, pero sí la tranquilidad de llegar a la casa con el pecho inflado de que todos los trabajadores salieron de la mejor manera. Y de forma personal, uno también hace todo esto por la familia.

¿Cómo ha sido aportar con su experiencia a la principal empresa minera del país?

Orgullo. Para mí significa mucho trabajar en la minería, yo vibro con esto. Gracias a mi trabajo he logrado muchas cosas. Mi hija se tituló hace poco de tecnóloga médica y esas cosas son impagables. El pequeño granito de arena que aportamos aquí tiene una caja de resonancia bastante grande en todo Chile y me considero un motivador para los mineros, trato siempre de cuidarlos, saber cómo vienen a trabajar y que vuelvan sanos a sus casas con sus familias.

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